A la hora de comprarme ropa suelo ser fiel a mis marcas favoritas. Nice Things es, desde hace años, una de ellas. Siempre me han gustado sus estampados originales y la paleta cromática que tanto les caracteriza: colores cobrizos, granates, verdes botella, naranjas, azules… Es una de aquellas marcas que evoluciona contigo y con la que te sientes cómoda a los 20, a los 30, a los 40 y mucho más. En cierto modo, han sabido encontrar el equilibrio y se han centrado en darle forma a su propio estilo, huyendo de estereotipos.
Una de las cosas que más me gustan de Nice Things son sus tejidos. Es como una vuelta a mi infancia, creo que es por eso por lo que me siento tan cómoda con estas prendas. Predominan las texturas de toda la vida: el algodón, la lana, la alpaca, la pana, el terciopelo (o piel de melocotón, como le llamaba mi abuela). Estos materiales, en combinación con los prints exclusivos, le dan un toque afrancesado, atemporal y elegante a sus colecciones.
Pero no sólo por sus prendas es conocida Nice Things. Sus colecciones de calzado, bolsos y complementos son la guinda del pastel. Sus zapatos me vuelven loca, me recuerdan a mis zapatos favoritos de toda mi vida. Sus foulares, bufandas y accesorios, como collares y broches, están diseñados para aportar un toque de sofisticación a los looks más básicos.
Nice Things fue creada en 1995 por Paloma Santaolalla y Miguel Lanna, una pareja unida por la moda en lo profesional y lo personal. Desde 2012, Paloma Lanna, hija de ambos, está al frente de esta empresa familiar que no para de crecer aquí y a fuera.
En definitiva, una de mis marcas favoritas que si no la conocéis os invito a visitar. Además, ahora están de rebajas, no digo más 🙂
En tres conceptos: colores y tejidos únicos, estilo diferente y una preciosa historia detrás. Cada vez estoy más convencida que una marca sin historia es una marca sin alma. Y Nice Things cumple este requisito a la perfección con una historia de familia, pasión y amor que algún día me encantaría explicar.
Mis fichajes: ¡Qué difícil decidirme! Entre su colección maravillosa de zapatos, creo que me quedaría con los Wallabee Shoes. Tenía unos de este estilo cuando era pequeña que me encantaban. De ropa, me parece precioso el Jersey Ruiseñor, el Sweater Intarsia y la Túnica Pecha Bordado. Las túnicas son una de sus prendas más genuinas y creo que dan mucho juego.
Lo que más me gusta: que huyen de cualquier similitud con otras marcas y siguen, desde siempre, su instinto en el mundo de la moda. Además, tienen un compromiso firme con los principios establecidos en materia de derechos humanos y medio ambiente, valores que hoy en día escasean un poco en este sector.