Inés y Marc, una pareja de arquitectos de Barcelona, han creado Annice, una marca de moda infantil con la que han revolucionado el sector. Llevaban tiempo buscando prendas para sus hijos que huyeran de la uniformidad y de los cortes clásicos, sin éxito. Acaban de presentar su primera colección con prendas nada tradicionales, minimalistas, ligeras y, a la vez elegantes, para niños y niñas de 3 a 10 años.
La Paper Lane Collection tiene mucho que ver con la filosofía de la marca: conseguir delicadeza y feminidad desde la sobriedad, versatilidad y confort sin renunciar al buen vestir. Y todo diseñado y fabricado en Barcelona para todo el mundo. “En nuestros diseños, no hay más ornamento que el propio detalle: un corte en la propia pieza, una costura, un pliegue, un botón. Los tejidos y coloridos completan su diseño, potencian su expresividad o la suavizan”, afirma Inés.
Quizás lo más emocionante de Annice, desde mi punto de vista, es, sin duda, su historia. Se trata de un sueño hecho realidad que lleva detrás muchas horas sin dormir, tres jornadas laborales diarias, mucho empeño y una alta dosis de talento y valentía.